Al parecer el desarrollo del primer modelo híbrido enchufable de la marca de Woking, el McLaren Artura, ha salido más caro de lo que la empresa había considerado y sus costes se han elevado al punto que ha tenido incluso que vender parte de su colección de autos para poder continuar con el desarrollo del nuevo auto.
De acuerdo con un informe de Automotive News Europa, y confirmado por un portavoz de la marca, McLaren habría vendido parte de su exclusiva colección de autos para poder financiar “importantes actualizaciones técnicas” del superdeportivo electrificado, aunque en realidad los ingresos por esta venta podrían no ser suficientes para concluir el desarrollo.
Concretamente McLaren contaba, hasta antes de esta venta, con un total de 54 autos Fórmula 1 y varios ejemplares del McLaren F1 dentro de su colección personal, sin embargo, ha tenido que deshacerse de algunos de estos vehículos para continuar con el desarrollo del Artura.
McLaren Artura, un proyecto que está elevando los costos
De acuerdo con lo que revela el informe el accionista mayoritario de McLaren, el fondo soberano de Bahrein Mumtalakat, firmó un acuerdo para invertir 100 millones de libras esterlinas adicionales para que los ingenieros puedan perfeccionar algunos problemas con el Artura a cambio de parte de la colección de autos, sin especificarse qué modelos son los que se han vendido.
Ante la publicación de esta noticia, McLaren también anunció que actualmente se encuentran buscando otros socios para continuar con el desarrollo del Artura, lo que podría indicar que la enorme inversión de su accionista mayoritario no será suficiente para concluir la fase de desarrollo de este superdeportivo híbrido enchufable.
Ya desde la primavera de 2021, la marca comenzó a experimentar sus primeros problemas con el desarrollo del Artura, que inicialmente programó sus primeras entregas para finales del año pasado, pero que, debido a problemas de suministro por la crisis de los semiconductores a nivel mundial y a algunos problemas de desarrollo, concretamente fallas importantes en el motor y el software, el lanzamiento tuvo que retrasarse hasta que una nueva con la inyección de capital llegue en estos días.
Al respecto, McLaren dejó en claro que trabajan arduamente para resolver estos problemas y que todas las unidades del McLaren Artura serán revisadas de manera minuciosa y pasarán todas las pruebas de confiablidad y rendimiento antes de que estos lleguen a manos de sus compradores.