De su familia, es el más grande. También, el más lujoso. Es, el Génesis G90 2020, que ha recibido importantes retoques para mantenerse actualizado y competitivo.
Esta versión del Génesis G90 2020 ha llegado al mercado con una suspensión mejorada, mucho más suave; una parrilla frontal que le da un carácter más deportivo, un sistema de infoentretenimiento que es ahora más ágil y materiales en la cabina, aún más sofisticados.
Es un lujoso sedán que compite, cara a cara, con algunos alemanes muy elegantes y de renombre.
Su tecnología, la calidad en la fabricación, el suave andar y los pequeños detalles que marcan una gran diferencia, sin duda hacen que el comprador piense en que la relación precio-valor, es excelente.
Génesis G90 2020: Una cabina de lujo
Este sedán de lujo puede llevar hasta cinco pasajeros. Sin embargo, el espacio central en la segunda fila de asientos es estrecho, por lo que cuatro personas viajarán siempre más confortables que cinco.
El acceso a la cabina es muy generoso gracias a unas puertas que se abren con amplitud.
Esa sensación de espacio se traslada al interior del Genesis G90, que brinda amplitud para las piernas y que, con un techo alto, deja espacio para que incluso pasajeros altos o de talla grande, no se sientan asfixiados.
Los materiales son de excelente calidad. Son suaves al tacto y con acabados de alta gama en los que destacan detalles lujosos.
Además, las butacas en ambas filas permiten ajustes ara mayor confort. En el caso de la butaca del conductor, los múltiples ajustes -incluyendo los que son para el área lumbar- permiten encontrar una posición de manejo adecuada.
En el caso de mi vehículo para la prueba -Genesis G90 RWD 3.3T- tenia 22 ajustes posibles para el asiento del conductor y 16, para la butaca del pasajero en la primera fila.
Esto, contribuye a una buena visibilidad tanto hacia delante como hacia atrás, y en caso de necesitar asistencia, cuenta uno con cámara de 360 grados.
También ajustable para favorecer el confort, el control de temperatura en ambas filas de asientos.
Controles al alcance de la mano
La consola central es como una pieza de arte, en la que destaca una pantalla de 12.3 pulgadas y alta definición que integra información, entretenimiento y navegación, impecablemente. La pantalla es táctil, aunque también se pueden usar las tradicionales perillas y botones para la navegación.
El sistema es fácil de operar y en cuanto a la tecnología, el Genesis G90 2020 es compatible con Apple CarPlay y Android Auto. En ambas filas de asientos encontramos conexiones USB y en la zona delantera encontramos un cargador inalámbrico para el móvil.
Y, no puedo dejar de mencionar que una cabina muy silenciosa es una delicia cuando se tiene un sistema de audio Lexicon de 17 parlantes que permite disfrutar de la música en su máximo esplendor.
El Genesis G90 2020 cuenta con radio AM/FM/HD/MP3/CD/DVD y la posibilidad de suscripción a radio satelital.
Por supuesto, tratándose de un auto tan espacioso, las áreas para colocar objetos o apoyar bebidas, también están presentes en forma generosa. No sobran, pero, tampoco faltan.
El maletero ofrece unos 15.7 pies cúbicos para llevar carga. Aunque no es muy grande, la apertura amplia permite colocar y sacar carga fácilmente.
No importa el modelo, hay lujo y potencia en Genesis G90 2020
El Genesis G90 2020 se ofrece en dos modelos, que se diferencian en principio, por la motorización.
El primero de estos modelos es el 3.3T Premium. Se trata de un motor V6, turbocargado, que entrega 365 hp y 376 lb-pie de torque.
El segundo, es el 5.0 Ultimate, un V8 de cinco litros que brinda 420 hp y 383 lb-pie de torque.
En ambos casos, la transmisión es automática, de ocho velocidades.
El sistema HTRAC (AWD) estás disponible como opcional.
En el modelo 3.3T Premium, encontramos -además del lujo y confort ya descritos- techo panorámico, suspensión adaptativa, cierre de puertas suave, apertura automática para el maletero y sensores traseros y delanteros -ideales para maniobras de estacionamiento.
La tapicería es en cuero, los asientos delanteros cuentan con calefacción y ventilación, ofrece persianas para bloquear el sol en los asientos de la segunda fila y en materia de seguridad, cuenta con sistema de detección de tráfico en punto ciego, sistema de asistencia para mantenerse en la línea de manejo y sistema para monitorear el nivel de alerta del conductor.
Al dar el paso al 5.0 Ultimate, nos encontramos con algunos elementos de más alta gama. Por ejemplo, una pantalla doble de 10.3 pulgadas y asientos posteriores con ventilación.
En cuanto al consumo de combustible (G90 RWD 3.3T), el modelo que tuve para la prueba rendía 17 mpg en la ciudad y 25 mpg en la autopista.
Es un vehículo en el que se puede disfrutar un manejo suave, silencioso. Uno, en el que podemos sumergirnos como si fuésemos en una burbuja en la que, incluso si hay mucho tráfico a nuestro alrededor, encontramos calma.
El Genesis G90 2020 es atlético y elegante. Queda claro que su equipo de diseño -tal como nos ha informado la marca- se planteó crear un objeto armonioso, incluso antes de hacer el primer boceto.
Es algo que podemos observar con precisión al contemplar las luces traseras y los detalles en la parrilla.
También, podemos ver el concepto G-Matrix de Génesis, inspirado para reflejar la luz de un diamante y que por primera vez se encuentra como opcional para aplicarlo a las llantas de 19 pulgadas.
Siempre en el territorio del diseño y los detalles cuidados al milímetro, el cuero es de primera el cromado es exquisito y la madera auténtica.
Este vehículo, es una joya, a un precio tremendamente competitivo, considerando el segmento en el que se ubica. El modelo base arranca en los $72,950 y el modelo que tuve para la prueba llegaba a los $73,195.
Impresiones personales
El Génesis G90 2020 es una oda a los sentidos. Envuelve con sus texturas, con los detalles de diseño, con la invitación constante a subirse en él y dar un paseo. Su andar suave, es invitación permanente.
Dicho esto, no se trata de un automóvil que impresiona solo por los materiales de la cabina o por su línea externa. Lo hace, porque el conjunto está bien logrado.
Integra el diseño con la oferta en tecnología y conectividad, con la potencia en los motores que ofrece y con la seguridad que presenta.
Para los amantes de los V8, este auto es una excelente opción (no es que abunden en el mercado), a sabiendas de que el consumo de combustible será más elevado (19 mpg, combinando ciudad y carretera) que el motor de 3.3 litros, aunque no por mucho.
Con certeza, me atrevería a compararlo con modelos alemanes consolidados. Está claro que no tiene la edad, el pedigrí, de muchas de esas marcas. También, que no “tiembla” al ponerse frente a ellos para competir de tú a tú, desde la calidad y desde el precio.