La firma de Woking ya tiene un buen recorrido en cuanto a vehículos electrificados se refiere. No podemos olvidar sus incursiones del pasado como el P1 presentado en 2013 y el Speedtail presentado más recientemente, aunque quizá su nuevo proyecto, sea el más ambicioso que la marca haya emprendido en su historia: McLaren Artura.
La historia del nuevo McLaren Artura comienza algunos meses atrás, cuando la firma británica nos dejó entrever las primeras pruebas de rendimiento del modelo camuflado bajo la carrocería del McLaren 540C, para poco después mostrar un segundo prototipo completamente camuflado, que respondía a los bocetos de diseño registrados por patente en China ante la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (WIPO).
McLaren Artura, el nuevo superdeportivo híbrido
Ahora, ya oficialmente bautizado como McLaren Artura, el nuevo auto se dio a conocer hace un par de días y fue etiquetado oficialmente por el mismo fabricante como su próximo superdeportivo híbrido de alto rendimiento (HPH por sus siglas en inglés).
El nuevo McLaren Artura se ubica entre el McLaren GT y el 720S en cuanto a rendimiento, acoplando detalles estéticos inspirados en otros modelos, como los faros similares a los de un Speedtail, los espejos retrovisores del 720S, el sistema clásico de doble salida de escape elevado y dos enormes entradas de aire tras las puertas, similares a las del McLaren GT.
Aun cuando comparte ciertos elementos con otros vehículos de la marca, en su estructura el McLaren Artura es completamente distinto a los demás, y es que será el modelo que estrene el nuevo chasis de fibra de carbono de la firma, conocido como McLaren Carbon Lightweight Architechture (Arquitectura McLaren Ligera de Carbono o MCLA por sus siglas en inglés), diseñada para montar conjuntos propulsión eléctricos y las tecnologías de última generación sin elevar el peso del vehículo para mantener el rendimiento al límite.
El motor del superdeportivo
Mecánicamente, el McLaren Artura equipará un conjunto híbrido enchufable que combina un motor a gasolina V6, con un motor eléctrico alimentado por una batería de 7.4 kWh de capacidad, que tendrá una autonomía máxima de 19 millas, que serán más que suficientes para realizar trayectos urbanos cortos, alcanzando los 94 hp solo con el motor eléctrico y los 671 hp con ambos motores, asociado a una transmisión automática de doble embrague y 8 velocidades.
Estas cifras le permiten alcanzar una aceleración de 0 a 62 mph en 3.0 segundos, de 0 a 124 en 8.3 segundos y una velocidad máxima de 205 mph, limitada electrónicamente, mientras que, en modo puramente eléctrico, la velocidad máxima es de 60 mph.
A nivel interior, es fácil detectar que tanto el tablero como el cuadro de instrumentos digital y el volante provienen del McLaren Elva.
En este caso y pensando en el desempeño deportivo, la consola central da cabida a los controles más básicos. Otros aspectos, como el climatizador, radio, GPS, telemetría y función drift se controlan desde una pantalla táctil de 8 pulgadas instalada en posición vertical.
Al respecto de este lanzamiento, desde McLaren también han comentado que en realidad no pertenecerá a la Sport Series actual, sino que representa el nacimiento de una “nueva generación” de superdeportivos que busca abrirle la puerta de manera regular a la electrificación de sus vehículos, buscando con ello alcanzar el objetivo de no comercializar autos con motores de combustión hacia 2032, como lo ha establecido el Reino Unido.
Así pues, la “Sport Series” actual de McLaren desaparecerá con el reciente lanzamiento del McLaren 620R, que precede a la presentación del McLaren Artura.
La producción de este nuevo superdeportivo ya ha iniciado en Woking y se espera que las primeras unidas se entreguen en verano.