Hay encuentros que siempre son gratos. Y este ha sido mi caso con el Nissan Altima 2021, un sedán mediano de cuatro puertas que en su nueva versión 2021, forma parte la sexta generación de este vehículo, totalmente rediseñado hace apenas un par de años.
No es casualidad que sea el auto más vendido de la marca japonesa y el sedán más vendido en Estados Unidos en 2020. Su relación precio-valor es muy buena.
Por fuera, es sofisticado y con un perfil ágil. Por dentro, en sedán cómodo, práctico y que sorprende con tecnología y conectividad que no siempre vemos en este segmento.
Los cambios, respecto al modelo 2020, no son muchos, pero son interesantes a ojos del consumidor: el motor turbocargado está disponible solo en el modelo SR y el modelo SV pierde algunos elementos que eran estándar, lo que ha permitido reducir su precio.
A inicios de 2020 tuve para la prueba el modelo el 2.0 Platinum FWD VC-Turbo. En esta ocasión, me trajeron el 2.0 SR FWD VC-Turbo capaz de entregar 236 hp y 267 lb-pie de torque.
Este motor VC-Turbo de 2.0 litros tiene un desempeño comparable al de algunos motores de gasolina V6, pero con un consumo de combustible similar al de un cuatro cilindros.
El Nissan Altima 2021 se ofrece en cinco niveles: S, SV, SR, SL y Platinum. Foto: Nissan
Nissan Altima 2021: práctico, funcional y sobrio
Este Nissan Altima 2021 me resultó muy funcional. Su andar es suave, y mi modelo de prueba contaba con un sistema activo de cancelación de ruido, para que el “ronroneo” del motor no se colara en la cabina.
Del manejo, me gustó su respuesta precisa al tomar las curvas, incluso, las cerradas. Mantiene la línea y la compostura. Responde bien a la aceleración y a la frenada cuando se le exige en caso de emergencias, y pasa de 0-60 mph en poco menos de 8.5 segundos. Por supuesto, hay que recordar que este no es un vehículo deportivo y ese número es promedio en el segmento.
La cabina es sobria, sin excesos y armoniosa. Desde la posición del conductor, todos los controles están al alcance la mano. Las funciones de perillas y botones están bien identificadas y en general, todo es de uso sencillo, más bien intuitivo.
Las butacas han sido diseñadas con el concepto “gravedad cero”, inspirado en la NASA, que ofrece asientos que, entre firmeza y suavidad, resultan muy confortables y lo hacen sentir a uno, que “está suspendido en el espacio”.
Hay buen número de espacios para colocar objetos pequeños y bebidas, el área para recargar el móvil es de fácil acceso y el espacio en el maletero es generoso, permitiendo abatir la segunda fila de asientos para ampliarlo si fuese necesario. Para abatir esas butacas, se puede usar una palanca ubicada en el maletero, o manualmente, desde la cabina.
La cabina es sobria, sin excesos y armoniosa. Desde la posición del conductor, todos los controles están al alcance la mano. Foto: Nissan
La tecnología y conectividad son parte del Nissan Altima
Los pilares traseros son más bien anchos. A algunas personas, por su posición de manejo, esto pudiera restarles visibilidad. Ayuda, por supuesto, la cámara trasera y el hecho de que en maniobras de retroceso se puede contar con un sistema que detecta obstáculos y frena si siente que hay riesgos.
El Nissan Altima 2021 es compatible con Android Audio y Apple CarPlay, y en el caso de mi modelo para la prueba pude contar con un sistema de audio Bose, con nueve parlantes, que incluía amplificador digital con ocho canales de ecualización.
También, tuve a mi disposición transmisión de audio a través del sistema Bluetooth, asistente de mensajería de texto (manos libres) y reconocimiento de voz, gracias a Siri Eyes Free. Por si eso fuera poco, a través de Nissan Connect, se puede acceder a ciertas funciones remotas como Amazon Alexa Skill y Google Assistant Action.
Altima: Modelos con excelente relación precio-valor
El Nissan Altima 2021 se ofrece en cinco niveles: S, SV, SR, SL y Platinum.
Las opciones de motor son, estándar, un 2.5 litros de cuatro cilindros que entrega 188 hp y 180 lb-pie de torque, combinado con una transmisión automática continuamente variable. Y, tal como mencioné al inicio de la nota, disponible en el modelo SR (AWD). Es un motor turbocargado de 2.0 litros y cuatro cilindros.
El nivel básico es el S. Para tratarse de un modelo de entrada, está muy bien equipado. Sus rines son de acero, de 16 pulgadas. Cuenta con tecnología Bluetooth, conexión para Apple CarPlay y Android Auto, un puerto USB, pantalla táctil de siete pulgadas y encendido sin llave.
Las funciones de perillas y botones están bien identificadas y en general, todo es de uso sencillo, más bien intuitivo. Foto: Nissan
También, con ajustes electrónicos para la butaca del conductor, una segunda fila de asientos con buen espacio, butacas posteriores abatibles (60/40) para ampliar el área de carga, sistema de alerta de colisión frontal inminente, sistema de frenada de emergencia, sistema inteligente de alerta para el chofer, tecnología Bluetooth, encendido remoto, conexión de 12 voltios DC y cámara posterior.
Al dar el paso al modelo SV encontramos un sedán con rines de aleación de aluminio, de 17 pulgadas. La pantalla táctil pasa a ser de ocho pulgadas y se incorpora un puerto USB-C, adelante y dos puertos USB regulares, en la segunda fila de asientos.
Cuenta con elementos como el control dual de temperatura, calefacción en la primera fila de asientos, luces frontales LED y tecnología ProPILOT, exclusiva de Nissan, que en ciertas condiciones de manejo reduce la carga de trabajo del chofer, asistiendo en la aceleración, dirección y frenada.
ProPILOT utiliza sistemas de cámara, radar, sensores y control electrónico, viene a ser la intersección entre el control crucero adaptativo y el sistema para mantenernos en la línea de manejo.
Cada ajuste es suave, casi diría que progresivo; al probarlo, en ningún momento fue agresivo o echó el volante hacia un lado u otro con fuerza. Era más bien, una suave pero firme sugerencia en el manejo.
Las butacas han sido diseñadas con el concepto “gravedad cero”, inspirado en la NASA. Foto: Nissan
El modelo SR pudiéramos considerarlo como el más deportivo de la familia.
Calza rines de aluminio de 19 pulgadas, nos ofrece paletas para cambios tras el volante, tiene una suspensión un poco más rígida y su aspecto externo es levemente diferente -gracias a un difusor posterior-, con elementos aerodinámicos que le dan personalidad propia y detalles cromados en la parrilla.
El volante está forrado en cuero y los elementos de seguridad que son opcionales del nivel S, en el SR son estándar. Si uno quiere, se puede agregar el techo panorámico.
De notar también, el sistema Nissan Safety Shield 360, es estándar en este modelo.
Este sistema ofrece monitoreo frontal, posterior y lateral, que permite la intervención de sistemas de seguridad en caso de necesidad, tales como sistema de frenada de emergencia al detectar un peatón; frenada posterior automática; alerta al salirse de la línea de manejo y alerta de tráfico en punto ciego detectado por radar.
Cuando la seguridad es la meta, todo suma y esta tecnología de Nissan, ¡marca una diferencia en positivo!
¿Otro toque particular en este modelo? Las carcasas de los espejos retrovisores son en color negro.
Hay buen número de espacios para colocar objetos pequeños y bebidas. Foto: Nissan
El SL se presenta como una alternativa de más alto nivel, con tapicería en cuero, volante con calefacción, control dual de temperatura, ajustes electrónicos para la posición del asiento del acompañante en la primera fila, sistema de audio Bose con nueve parlantes, sistema de navegación y sistema de reconocimiento de señales de tránsito.
En el tope de la oferta, encontramos el nivel Platinum.
Calza rines de 19 pulgadas, ofrece luz ambiental en la cabina, incorpora cámara de 360 grados, techo panorámico, ocho ajustes para la butaca del conductor -incluyendo los que son para la región lumbar-, cuatro ajustes para la butaca del acompañante en la primera fila, calefacción en la primera fila de asientos y en el volante.
También ofrece funciones de memoria para las posiciones de manejo, encendido remoto y control inteligente de temperatura.
Como las necesidades de conexión son cada vez más, vienen muy bien los dos puertos USB en la segunda fila de asientos (con iluminación, para encontrarlos fácilmente).
El volante es telescópico y se le puede ajustar la altura. También tiene sistema de asistencia en pendiente, luces antiniebla, sistema de alerta de tráfico posterior cruzado y sistema de monitoreo de presión en los neumáticos.
Nissan Altima cuenta con el nuevo lenguaje de diseño de la marca. Foto: Nissan
Cinco estrellas en seguridad
El consumo de combustible del Nissan Altima 2021 que tuve para la prueba se ubica en 25 mpg en la ciudad y 34 mpg en la carretera.
En las pruebas de seguridad de la National Highway Traffic Safety Adminsitration (NHTSA), el Nissan Altima obtuvo 5 estrellas -el máximo posible- en seguridad general en caso de accidente, en choque frontal (para el chofer), en choques laterales (para la segunda fila de asientos ) y en volcadura.
El precio del Nissan Altima 2021 arranca en los $24,300 y el modelo que tuve para la prueba, incluyendo opcionales, llegaba a los $32,905.
Impresiones personales
Cada vehículo tiene una razón de ser. No todos se ajustan a estilos de vida, presupuestos y necesidades varias de los consumidores.
Partiendo de esa base, el Nissan Altima es un sedán que siempre me sorprende.
Hay humildad en su diseño. No es ostentoso. No trata de impresionar. Aun así, es lo que consigue. Y lo hace porque ha sido pensado para llevar el día a día con gracia, con comodidad, con seguridad.
Me gusta porque combina elementos que, para mí, son MUY importantes: Es práctico; es buen compañero en la ciudad y la carretera; es cómodo; incluye tecnología que uso, que necesito y que quiero; me conecta con el mundo; rinde en materia de combustible y es seguro, tanto para mí, que manejo, como para mis pasajeros, que son amigos y familia.
